Sarcoma de Ewing en niños
Es un tipo de cáncer situado en los huesos o en los tejidos blandos. El sarcoma de Ewing es el segundo cáncer de hueso más común en niños, y normalmente se presenta entre los diez y los veinte años. También es más común en hombres que en mujeres. El sarcoma de Ewing y los tumores neuroectodérmicos primitivos (PNET) son un tipo de cáncer que incluyen diversos tipos de tumores malignos que comparten una anormalidad cromosómica común. Los tumores de Ewing están formados por células pequeñas no diferenciadas y suelen encontrarse con más frecuencia en uno de los huesos largos de la pierna o del brazo, en los huesos planos de las costillas o la pelvis, o bien en la columna. También puede ser que se presenten en cualquier otro hueso del cuerpo o en tejidos blandos.

El tumor de Ewing situado en el tejido blando se denomina sarcoma de Ewing extraesquelético. Y se suele dar en el muslo, la pelvis, en áreas de la columna, en la pared del tórax o en los pies.
El tumor neuroectodérmico primitivo en huesos o tejidos blandos es el menos común de la familia de tumores del sarcoma de Ewing. Está formado por células nerviosas inmaduras.
Los síntomas
Los síntomas más comunes del sarcoma de Ewing son:
- Dolor
- Rigidez
- Sensibilidad en el área del tumor
También puede haber inflamación o una masa alrededor del hueso o del tejido afectado. Muy a menudo, en el momento del diagnóstico se encuentra una fractura patológica (una rotura sin traumatismo), ya que el tumor ha debilitado el hueso. Otros síntomas menos comunes de este tipo de tumor son la pérdida de peso y la fiebre.
A quién afecta el sarcoma de Ewing
Las neoplasias malignas en niños y adolescentes son enfermedades poco frecuentes, pero son una de las causas de morbilidad más importante en estos grupos de edad. El sarcoma de Ewing representa el 3 % de los cánceres diagnosticados a niños en España. Cada año hay 30 nuevos casos en menores de 14 años.
El diagnóstico
En caso de que el niño presente síntomas de este sarcoma, el médico puede hacer varios exámenes de diagnóstico que pueden incluir:
- Radiografías
- TAC (tomografía)
- Resonancia magnética (RM)
- Gammagrafía ósea
- Biopsia del tumor
- Aspiración y biopsia de médula ósea
Estos exámenes ayudarán a determinar el tamaño y la ubicación del tumor y a indicar si se ha propagado a otras partes del cuerpo
El tratamiento habitual
Frecuentemente se utilizan tres tipos de terapia para tratar los tumores de Ewing. Siempre se utiliza la quimioterapia porque la cirugía (sea para salvar el miembro o sea para amputarlo) o la radiación se usan para el control local. El tipo de terapia va a depender de la edad del niño, de la ubicación del tumor y de si se ha propagado a otras partes del cuerpo.
La prevención
Actualmente no hay medidas que permitan prevenir este tumor.