Consejos de salud para pacientes con sarcomas y otros tumores musculoesqueléticos
En general, los pacientes con sarcomas y otros tumores musculoesqueléticos son muy vulnerables y reciben tratamientos muy largos. Es por esto que, en estos casos, la educación sanitaria, tanto a los pacientes como a la familia o al cuidador/a principal y también en el momento del alta, es esencial. Dicha educación tendrá en cuenta la higiene, las posturas, la medicación, el dolor o el apoyo emocional.

¿Qué debes tener en cuenta si tienes sarcomas y otros tumores musculoesqueléticos o cuidas de alguien que tiene?
Es importante seguir una serie de consejos relacionados con el estilo de vida y el tratamiento. Los más importantes son:
- La alimentación y la hidratación: se aconseja seguir una dieta saludable y equilibrada, que aporte los alimentos necesarios, proteicos y calóricos.
- El control de la eliminación urinaria y fecal: hay tendencia al estreñimiento causado por la medicación para el dolor (mórficos o derivados), por eso se recomienda una dieta rica en fibra.
- Los hábitos poco saludables: se deben evitar los hábitos como fumar, beber o tomar otros tóxicos.
- La hidratación y vigilancia de la piel: normalmente la piel queda muy frágil y deteriorada por los efectos de los tratamientos agresivos.
- El control de las heridas postcirugía: se recomienda limpiarlas con jabón poco agresivo e hidratar bien la piel.
- Los efectos secundarios (localizados y sistémicos) de la medicación: se tienen que controlar y evitar efectos como las náuseas, los vómitos, las diarreas, la descamación de la piel, el prurito...),
- La educación en la movilización de extremidades: a veces hay casos de amputación y de síndrome del miembro fantasma.
- La máxima potenciación de la autonomía de la persona paciente en la nueva situación y proporcionar los utensilios necesarios: muletas, andadores, silla de ruedas...
- El control del dolor: medicación, técnicas de relajación, control de la respiración, técnicas de movilización y ahorro de energía.
- La educación en la prevención de lesiones y caídas: hay que llevar calzado adecuado, adaptar el espacio en el domicilio (eliminación de barreras), andar con seguridad, llevar ropa cómoda...
- El control de las infecciones: se debe vigilar la temperatura y los síntomas, ya que no hay que olvidar que está en una situación de inmunodepresión.
- La insistencia en la importancia de la higiene bucal.
- La información y evaluación de la correcta toma de la medicación.
- La vigilancia y control de “port-a-cath”, si se lleva uno.
- Dormir de noche y descansar durante el día para facilitar el descanso nocturno.
- El apoyo profesional al paciente, a la familia o al cuidador más directo: hay que proporcionar la información necesaria, adecuada y de forma comprensible del proceso de la enfermedad y de los cuidados. Es necesario facilitar el apoyo en formato papel y que otros tipos de profesionales puedan dar también su apoyo.
- El respeto por la autonomía y la toma de decisiones del paciente.
- La información sobre el documento de voluntades anticipadas.