Sepsis
La sepsis es una afección potencialmente mortal que se produce cuando el cuerpo responde ante una infección y ataca sus propios tejidos y órganos. En determinadas ocasiones se da una disfunción orgánica (por ejemplo, hipotensión), que comporta una respuesta anómala ante la infección y se traduce en un cuadro clínico muy grave.

¿Cómo actúa la sepsis?
Un choque séptico surge cuando las anormalidades de la circulación, celulares y metabólicas son tan profundas como para aumentar la mortalidad. Eso se puede identificar por la hipotensión persistente que necesita vasopresores para mantener la presión arterial y los niveles de lactato sérico. Con estos criterios, a pesar de la reposición adecuada de volumen, la mortalidad hospitalaria es superior al 40 %.
Los síntomas
La sepsis comporta una historia sugestiva de infección que altera el cuerpo y se desencadena en signos que se pueden asociar a una disfunción orgánica o a una hipoperfusión sistemática. Estos síntomas son:
- Alteración del estado de conciencia
- Aumento/disminución de la frecuencia cardíaca
- Hipotensión arterial
- Saturación de oxígeno disminuida
- Hipertermia
- Hipotermia
¿A quién afecta la sepsis?
Cada año se da una media de 212,7 enfermos de sepsis por cada 100.000 habitantes en la red sanitaria catalana. En concreto, entre los años 2008 y 2012 se detectaron 82.300 personas con casos de sepsis grave y, en 2012, se registraron 20.228 casos.
Con respecto al Vall d'Hebron, en 2010 ingresaron en el Servicio de Medicina Intensiva 232 pacientes con esta patología, una cifra que supone el 25,2 % de los ingresos en este servicio.
El diagnóstico
Para detectar la sepsis se hacen las pruebas siguientes:
- Analítica sanguínea con hemograma, hemostasia, bioquímica, biomarcadores, equilibrio arterial y muestras biológicas por cultivo en función del foco de sospecha
- Pruebas radiológicas
- Cribado rápido a pie de la cama
- Diagnóstico definitivo
El tratamiento habitual
El tratamiento precoz puede mejorar el pronóstico. Por este motivo, se activa un Código de Sepsis:
- Colocación de dos vías cortas y gruesas.
- Si hay hipotensión o lactatos, se inicia la resucitación con fluidos de tipo cristaloide.
- Administración del antibiótico durante la primera hora de la detección de la sepsis.
- Suministro de oxígeno.
- Control del foco en las primeras seis horas del diagnóstico.
- Monitorización y revaluación de la respuesta al tratamiento.
- Apoyo a la UCI de las diferentes disfunciones orgánicas.
La prevención
Para prevenir esta patología es vital la detección precoz del paciente que muestre una historia sugestiva de infección y que tenga una disfunción orgánica. Además, en algunas ocasiones es necesaria la vacunación.