Próstata benigna
La próstata es un órgano glandular presente en los hombres, y se encuentra atravesada por la uretra. Interviene en la formación del líquido seminal (80% del contenido) y, por lo tanto, es un órgano sexual. Cuando crece, sobre todo a partir de los 50 años, da lugar a la hiperplasia benigna, pero que dará síntomas ya que como consecuencia se constriñe la uretra prostática y, por lo tanto, obstruye el paso normal de la orina.
La uretra es el conducto urinario que va de la vejiga de la orina al exterior. En el caso del hombre, tiene dos tramos, la uretra prostática (que pasa por medio de la próstata) y la uretra peniana, que atraviesa todo el pene hasta el exterior.
![Próstata benigna Vall d'Hebron](/sites/hospital/files/styles/crop_16_9_large/public/prostata_benigna.jpg?itok=i643mF4s)
Cuando la próstata aumenta de tamaño (hiperplasia benigna de próstata o HBP), se produce la disminución del calibre de la uretra y esto causa los síntomas. La obstrucción de la uretra por parte de la próstata es progresiva y repercute en la vejiga de la orina, que tiene que hacer más esfuerzo para poder vaciar la orina. Además, puede facilitar infecciones de orina y la formación de litiasis (piedras o cálculos) procedentes de las sales que contiene la orina porque no se vacía con facilidad y por eso se produce la sedimentación de sales.
Si la obstrucción es muy importante, la dificultad para eliminar la orina puede llegar a lesionar los riñones porque la vejiga no se puede vaciar adecuadamente.
Los síntomas
Micción más frecuente de lo normal, micción nocturna, pérdida en la fuerza del chorro de la orina, urgencia miccional (el paciente percibe un deseo intenso de ir a orinar) y también episodios en los que se escapa la orina.
¿A quién afecta?
A hombres de más de 50 años, con aumento de la incidencia a medida que aumenta la edad.
El diagnóstico
Se realiza con la historia clínica, donde se recogen los síntomas del paciente, con un tacto rectal, de modo que el médico tiene acceso a la próstata para valorar su tamaño e irregularidades. Una ecografía dará información de los riñones, del tamaño de la próstata y grado de vaciamiento de la vejiga.
La determinación de PSA nos facilitará la sospecha de cáncer de próstata.
El tractamento habitual
Se basa inicialmente en fármacos por vía oral que relajan la musculatura prostática para facilitar el paso y la evacuación normal de la orina, y otros que reducen su volumen. En fases más evolucionadas será necesario hacer un vaciamiento de la parte central de la próstata mediante una resección transuretral o enucleación a través de láser.
Las pruebas más habituales
Exploración física, ecografía, determinación de PSA. Fluxometría y valoración del residuo postmiccional.
Prevención
No existe. Los controles periódicos o las consultas por la aparición de síntomas son la clave para el diagnóstico precoz.