El Dr. Guillermo Orti importa conocimientos del Memorial Sloan Kettering de Nueva York a la consulta de trasplantes de progenitores hematopoyéticos de Vall d'Hebron

Como el anuncio de los turrones, el Dr. Guillermo Orti, hematólogo de la Unidad de Trasplante de Progenitores Hematopoyéticos del Servicio de Hematología del Hospital Universitari Vall d'Hebron, ha vuelto a casa por Navidad después de ocho meses de formación en el extranjero. Es uno de los diez profesionales becados en la primera edición de las estancias formativas en centros internacionales de excelencia, con las cuales Vall d'Hebron ha inaugurado un programa que tiene como objetivo generar nuevo y impactante conocimiento para el hospital.

Ahora que comenzará la segunda edición, el Dr. Guillermo Orti nos relata su experiencia en uno de los hospitales más destacados y con más referencias literarias del mundo: el Memorial Sloan Kettering Center de Nueva York. Se menciona a Joan Didion en su maravilloso "El año del pensamiento mágico" y también a Paul Auster, uno de los escritores más arraigados a Nueva York, en "Brooklyn follies", ahora convertido en paciente. Precisamente, su esposa, la escritora Siri Hustvedt, cuando anunció que Paul Auster padecía cáncer, reflexionaba sobre una enfermedad que es diferente para cada persona. "Todos los cuerpos son iguales y no hay dos iguales". Lo sabe el Dr. Guillermo Orti. Como hematólogo, su especialidad es la enfermedad del injerto contra el receptor (EICR), una complicación posterior al trasplante de progenitores hematopoyéticos, que puede afectar hasta el 50 por ciento de los pacientes y está vinculada a un peor pronóstico. ¿Por qué afecta a algunos pacientes y a otros no? ¿Cómo avanzar en su diagnóstico? ¿Se puede evitar? ¿Y tratar?

El Dr. Guillermo Orti busca respuestas a estas preguntas en la consulta del Hospital Universitario Vall d'Hebron, a la que llevará aprendizajes de estos meses en el Memorial Sloan Kettering. El trasplante de progenitores hematopoyéticos es un tratamiento médico que se realiza cuando alguien tiene problemas con las células de la sangre. Estas células se llaman progenitores hematopoyéticos y se encuentran en la médula ósea, que es el interior de los huesos. En este procedimiento, se toman células saludables de la médula ósea o de la sangre de un donante compatible y se transfieren a la persona que necesita el trasplante. Estas nuevas células pueden ayudar a reemplazar las células de la sangre enfermas o dañadas. Sería como cambiar las piezas defectuosas de un coche con piezas nuevas para hacerlo funcionar mejor. Así, el trasplante de progenitores hematopoyéticos puede ser una forma de tratar enfermedades de la sangre como la leucemia u otros problemas que afectan a estas células.

- ¿Qué te ha impulsado a participar en la I Edición del Programa de Participación en estancias formativas en centros de excelencia internacional?
- Mi motivación principal fue ganar conocimiento sobre la enfermedad del injerto contra receptor (EICR), que es una complicación posterior al trasplante de progenitores hematopoyéticos que afecta hasta el 50 por ciento y está vinculada a un peor pronóstico de los pacientes.

- ¿Por qué eliges el Memorial Sloan Kettering Center?
- Es un centro de referencia mundial donde tienen una unidad muy interesante que combina muy bien la parte preclínica y la clínica. Esta alianza ayuda a desarrollar nuevos tratamientos. En la parte preclínica, disponen de un laboratorio transversal centrado en la enfermedad del injerto contra el receptor, en el cual he podido trabajar. Cuentan con una especialidad en la patología inflamatoria intestinal. Los conocimientos que estoy adquiriendo se pueden extrapolar al diagnóstico y tratamiento de enfermedades de carácter inflamatorio. En Vall d'Hebron, contamos con una consulta para estos pacientes que llevamos con la Dra. Laura Fox, la Dra. Ariadna Pérez y la Dra. Brigitte Sola, con las cuales trabajaremos estos nuevos conocimientos para avanzar tanto en la gestión como en el tratamiento de los pacientes diagnosticados con esta enfermedad en nuestra institución.

- ¿Qué conocimientos te llevas?
- Durante el tiempo que he estado realizando la estancia, de marzo a diciembre, he adquirido conocimientos básicos de la fisiopatología de la enfermedad, conocimientos sobre el tratamiento de estos pacientes y, por supuesto, también he conocido de cerca el sistema sanitario de los Estados Unidos y de una gran institución como es el Memorial Sloan Kettering Cancer Center. Me llevo una visión global sobre la enfermedad del injerto contra el receptor y nuevas herramientas.

- ¿Cómo planteas aplicar los nuevos conocimientos a tu retorno a Vall d'Hebron?
- Reconsideraremos la consulta de la enfermedad del injerto contra receptor, ya abierta y en funcionamiento desde hace dos años. Creo que tenemos que potenciar el acceso a nuevos fármacos, sobre todo en pacientes refractarios, y potenciar que este acceso sea precoz. Espero que en un futuro haya colaboraciones con el programa de trasplante del Memorial Sloan Kettering Cancer Center, y que esto facilite este acceso a estos fármacos a pacientes de nuestro centro. Por otra parte, espero que mi formación en el Memorial Sloan Kettering Cancer Center me permita iniciar una línea de investigación sobre la enfermedad del injerto contra receptor en nuestra institución.

- ¿Y tú qué has exportado de Vall d'Hebron?
- Cuando se trabaja en equipo siempre se aporta una parte. Creo que es enriquecedor para las instituciones recibir rotantes externos, que siempre aportan una visión diferente del tema. En mi caso particular, además de compartir conocimientos sobre nuestro sistema sanitario, he participado activamente en el desarrollo de protocolos de investigación.

- ¿Has visto alguna manera de trabajar que podríamos importar a Vall d'Hebron para mejorar?
- Creo que hay que potenciar el abordaje multidisciplinario a los pacientes. En nuestro entorno, ya lo realizamos, pero no lo tenemos estandarizado como en otros centros. Está claro que esto requiere un esfuerzo por parte de todos, y que la decisión final ha de depender del facultativo responsable, pero hay que potenciar el papel de otros profesionales de la salud en el cuidado del paciente. Nuestro sistema de salud en este sentido es bastante diferente. También me ha gustado la manera que tienen las instituciones de realizar el onboarding (aterrizaje) a los recién llegados, es un modelo poco europeo, pero que creo que facilita que los trabajadores en un hospital se sientan representados y más ligados al centro.

-¿Recomendarías la estancia a otros compañeros de Vall d'Hebron?

-Sin duda, tanto en la institución como en la unidad de enfermedad del injerto contra receptor en la cual estoy realizando la estancia.