Estreñimiento
El estreñimiento es un trastorno del hábito intestinal que se caracteriza por una disminución en la frecuencia evacuativa del excremento o en excrementos duros y difíciles de expulsar. Afecta más a las mujeres y, en muchos casos, cursa con dolor o molestias abdominales. Esta entidad tiene una repercusión personal, sanitaria y social muy importante.
En la mayoría de los casos, la causa del estreñimiento es desconocida, sin una lesión orgánica o anatómica que lo explique, y se define como estreñimiento funcional o primario. En otros casos, la aparición del estreñimiento se ve favorecida por determinadas enfermedades o medicamentos, que es lo que se conoce como estreñimiento secundario.
Dentro del estreñimiento primario podemos distinguir algunas variantes:
- Estreñimiento con tránsito colónico normal, es decir, que el tiempo que invierte el material intestinal en recorrer el intestino grueso es normal. Es el más frecuente y se asocia con dolor. A menudo se conoce como el síndrome de intestino irritable.
- Estreñimiento con tránsito colónico lento ocasionado por una alteración de la motilidad del colon, es decir, de los movimientos del intestino. En general, tiene síntomas más graves y una respuesta menor al tratamiento.
- Estreñimiento con dificultad expulsiva, debido a una alteración en la función defecatoria o a una anormalidad anatómica de la pelvis, del recto o del canal anal como el rectocele, enterocele y prolapso rectal.
- Estreñimiento asociado a patologías panintestinales complejas (miopatías y neuropatías intestinales), que, aunque son poco frecuentes, pueden dirigir a un fracaso continuo de los tratamientos administrados.
El estreñimiento secundario se debe al consumo de ciertos medicamentos, sobre todo opiáceos para el dolor, y a enfermedades neurológicas, metabólicas, infecciosas (Chagas) y al cáncer, entre otros.
Los síntomas
El más frecuente es la dificultad para la evacuación.
En caso de que haya alteración en la evacuación rectal, los síntomas pueden ser:
- esfuerzo en la defecación
- excrementos grumosos o duros
- sensación de evacuación incompleta
- ausencia de reflejo evacuando
- sensación de obstrucción
¿A quién afecta el estreñimiento?
Esta entidad es muy común tanto en adultos como en niños, y puede afectar a entre un 10 y un 30 % de la población mundial. El 69 % de los pacientes que lo sufren dicen que afecta a su rendimiento escolar o laboral, y el 40 % de los pacientes con estreñimiento ha consultado en alguna ocasión al médico por este motivo. En el Estado español, entre los años 2005-2006 se dispensaron más de 23 millones de unidades de varios laxantes durante un año.
El diagnóstico
En general, no se hacen estudios de rutina en pacientes con estreñimiento crónico si no hay signos de alarma como pueden ser fiebre, pérdida de peso o sangrado rectal. En cambio, el estreñimiento de reciente aparición, sin causa aparente o que no responde bien al tratamiento tiene que estudiarse mediante diferentes pruebas como:
- fibrocolonoscopia
- manometría anorrectal
- tiempo de tránsito colónico
- defecografía
- enema opaco
- escáner
- resonancia
El tratamiento habitual
El estreñimiento tiene que ser tratado de manera individualizada y hay que analizar la presencia de las causas que lo originen o lo agraven. También hay que investigar los hábitos dietéticos, higiénicos y el consumo de fármacos del paciente.
La ausencia de respuesta a este tratamiento tiene que ser valorada por especialistas.
Prevención
Existen varias maneras de prevenir el estreñimiento:
- Hay que evitar el sedentarismo y hacer ejercicio moderado.
- Hay que aumentar la ingesta de líquidos y de fibra.
- No hay que evitar defecar cuando se tienen ganas y se debe adoptar una postura adecuada a la hora de hacerlo.