Consejos de salud para convivir con la esclerosis múltiple
La esclerosis múltiple es una enfermedad progresiva del sistema nervioso central, discapacitante, de carácter crónico y con una alta complejidad y heterogeneidad. De esta manera, necesita atención de alta especialización multidisciplinar para su diagnóstico, seguimiento y tratamiento.
¿Qué debes tener en cuenta si tienes esclerosis múltiple o cuidas de alguien que la padece?
Las evidencias actuales son insuficientes para hacer recomendaciones sobre la prevención de la esclerosis múltiple. No obstante, se recomienda llevar un estilo de vida saludable y hacer actividad de forma habitual. La esclerosis múltiple afecta más a las mujeres que a los hombres, suele aparecer en personas adultas jóvenes y es la segunda causa de discapacidad no traumática.
Cuando se pacta con la persona paciente el inicio de un fármaco como tratamiento de fondo o sintomático de la esclerosis múltiple:
- Tiene que recibir educación muy concreta sobre la acción del fármaco, los posibles efectos secundarios, la vía de administración y la conservación con el fin de garantizar un buen cumplimiento y adherencia.
- Aunque la instauración del tratamiento de fondo, tan pronto como sea posible, permite un buen control de la evolución de la enfermedad, a veces se producen brotes que es necesario valorar y, en caso necesario, tratar en el hospital de día durante tres días y hacer el seguimiento adecuado del mismo para comprobar la recuperación.
Síntomas
Los síntomas de la esclerosis múltiple pueden ser muy variados, de modo que se recomienda consultar al equipo sanitario especializado cuando se sienta:
- Fatiga, si aparece se recomienda planificar momentos de actividad con momentos de reposo.
- Sensibilidad a los cambios de temperatura, se recomienda evitar temperaturas extremas y, en caso de fiebre, bajarla lo antes posible.
Aunque no existen evidencias científicas que permitan hacer recomendaciones concretas para prevenir o variar el curso de la enfermedad, hay una serie de consejos sobre la dieta, los hábitos y el ejercicio físico que los pacientes y, en general, toda la población, deben tener en cuenta:
- Hay que llevar un estilo de vida saludable.
- Se recomienda seguir una alimentación equilibrada y variada.
- Se debe hacer ejercicio.
- Es fundamental no fumar, puesto que el tabaco está relacionado con un empeoramiento en la progresión de la enfermedad.
También se recomienda seguir con la actividad cotidiana y mantenerse activo combinando momentos de actividad con momentos de reposo en caso de fatiga y buscando estrategias para economizar la energía.
La vitamina D adquiere una importancia relevante en su relación con la enfermedad, sobre la cual se está estudiando con intensidad. A menudo las personas afectadas presentan un déficit de esta vitamina, de modo que se recomienda tomar un suplemento de la misma, siempre bajo el criterio y el control del especialista.
La esclerosis múltiple es una enfermedad compleja y de carácter crónico, por lo que se recomienda que el entorno de la persona afectada tenga la información adecuada y amplia. También es positivo que puedan disponer del asesoramiento continuado siempre que sea necesario.
A la figura del cuidador familiar o profesional, cuando sea necesaria, puede ser útil ofrecerle formación y recomendaciones prácticas sobre temas como por ejemplo la alimentación, la higiene y la movilidad de la persona paciente.
Otras educaciones sanitarias vinculadas
Educación sanitaria en el diagnóstico, al inicio del tratamiento y para la movilización del paciente discapacitado.